miércoles, 4 de enero de 2012

Hay que follarse a las mentes.

Y ese debería ser nuestro único objetivo en esta vida como animales racionales que decimos ser.
Nuestro alter ego animal es el que nos induce a follar como conejos y disfrutar como cerdos, pero si en su día nos planteamos algo más allá de la propia existencia, este no debería ser más que otro tema en el que sumergirse.


                                                        Manual de como follarse a una mente.

Paso 1:  Tener en cuenta la existencia de la mente, porque una persona está formada por algo más que tetas y culos.
Paso 2: Desprenderse de la idea del placer físico como algo supremo, aferrarse a los orgasmos cerebrales y volar en el climax de las neuronas.
Paso 3: Empalmarte comiendo mentes, chupando cada rincón de las ideas y absorviendo toda aquella información que te hace renacer en tus sentidos.
Paso 4: Notar como el corazón retoza cuando la chispa se enciende en la cabeza y llega hasta la última uña del pie.
Paso 5: Jugar, toquetear, descubrir, palpar, saborear, morder, sentir, extasiarte y fumarte la esencia de la mente humana, sin más barreras, sin más peldaños, sin más máscaras.
Paso 6: Rebentar los barrotes de tu cárcel y hacer explotar tus convicciones para reestructurarlas en algo más grande, algo más atractivo, algo más lleno y enérgico.
Paso 7: Recibir con las piernas temblando, el pulso a mil y los sudores la sensación de volar sin cadenas.
Paso 8: Perder el miedo a la desnudez psicologica y fluir sin complejos entre impulsos nerviosos.
Paso 9: Dominar tu cabeza y hacerla parte de tu cuerpo por una vez, para creer que en algún momento le encontrarás sentido al hecho de vivir.
Paso 10: Disfrutar en compañia lo que a partir de ese dia denominaremos "vida".

Hay que recordar siempre: No hay mentes malfolladas, hay malfolladores de mentes.





Att: Lola Malibú.

Foto: Anaïs Serrano Alvarez

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